Hace unos años mi hijo y sus compañeros de curso del colegio básico hicieron un asado con pelotéo en el prado de la esquina. Tambien jugaron a la escondida, y al esconderse detrás de unos arbustos uno de ellos encontró un hueso. Los niños se quedaron mirando el hueso y detrás llegamos los padres a ver que pasaba. Ese hueso parecía un fémur… ese hueso parecía un fémur… Llamamos a la policía y llegó. Llegó un juez y cercaron el lugar. En 20 minutos llegaron hata los de la policía criminológica, y era domingo.
La verdad es que nunca más escuché realmente del asunto y eso que esto es un pueblucho.
Los alemanes son con los muertos más que exáctos, están llenos de reglamentos y tabús, por razones obvias. Ningún hueso anda dando vueltas por ahí, nadie puede quedarse con las cenizas de sus padres, como hacemos en Chile. Es parte del respeto al ser humano, como ellos lo entienden, que ni recordemos como tuvieron que aprenderlo, y del respeto a su dignidad, el darle sepultura. Ahora hay gente que quiere ser enterrada en el bosque.
Hay bosques oficiales, nada de desordenes, no de posibilidad remota de pasar a llevar la dignidad de la persona muerta.
Alguien me contó después que se suponían que en el caso del fémur, alguien había sacado tierra del cementerio, de la parte antigua, y la había tirado allí.
Qué raro es esto de los muertos y lo que consideramos respeto por el ser humano después de muerto.
Qué raro como funciona lo de la justicia y el par de huesos que te encuentres por ahi y lo que puedas hacer con ellos. Qué raro cómo los pueblos resuelven hacer con los perdedores de las guerras.
Dice mucho del ganador y de la democracia que produjo, pienso.
Y esto, porque leer el diario me muestra como viven otros y qué significa meter la cabeza en la arena en otras latitudes.
4 comentarios
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Sábado, abril 7, 2012 a 8:21 pm
GABU
Prrrrrrrrrrrr!!!!!
Me dió un poco de escalofríos pensar en los chicos jugueteando alrededor de restos humanos!!!!
P.D.:Cada cultura tiene sus tradiciones,es cierto,aunque el respeto por el ser humano con o sin vida,debería ser para tod@s iguales,no??
BESITOS REVELADOS
Sábado, abril 21, 2012 a 10:01 am
julego71
Pal, aquí te dejo la manera en la que solucionamos estos asuntos en España.
http://www.perezreverte.com/articulo/patentes-corso/231/treinta-y-seis-aguafiestas/
Sábado, abril 21, 2012 a 1:22 pm
Pal
El problema que a mi me preocupa no es solo la falta de humanidad con el perdedor, si no la falta de análisis histórico. No son los cuerpos, si no el delito.
Por lo demás, claro que un entierro y una tumba se le debe a cualquier ser humano, incluyendo a Hitler o al, para mi, innombrable.
En España, modelo elegido por Chile – y en esto aprovecho de pedir disculpas por lo que moleste a los españoles con mis análisis de SU problemática- es que todos son iguales, porque la muerte iguala a todos, y es cierto, pero hasta ese punto?
Justo eso es lo que no pasa en Alemania y me resulta tan agradable.
La muerte de la abuela de mi marido, que en su momento fue parte del movimiento nazi, no sirvió para recordar lo mucho que ella sufrió cuando la echaron de su tierra -actual Polonia- dándole 3 horas y con un chico de 1 año y una niñita de 3. Acá nadie dice como Perez Reverté: la pooobreeeeciiitaaaa con dos chiiicos. Y te aseguro que la vieja no solo era buena persona, sino además cariñosa y buena madre. Pero nazi.
Cómo olvidar la masacre a los judios que ella justificó? O hizo como que no pasaba. Cuántos vecinos tendría en la conciencia? y claro no era una jerarca nazi, era una tipa más del pueblo. No te voy a contar las penurias, más tarde, de llegar a un lugar como perdedora y empezar la vida sin nada después que la echaron. Ni si quiera supo durante 2 años si su marido estaba vivo. Estaba en àfrica, en un hoyo tapado con una reja. Los franceses lo ennazificaron,
No sé si la violaron, de eso acá no se habla pero es lo frecuente hasta el día de hoy en las guerras. La tremenda pena que conlleva ese hecho no evita su error político, humano. Incluso, podría explicarte como fue que llegó a eso a ser parte del Mädchenbund, es bastante “comprensible”. Es una historia de mucha pobreza, minoría y frontera nacional. Un caso de pobre güeóna desubicada.
Y entonces? Lo dejamos así? no la responsabilizamos?
Bueno, creo que lo que nos falta a los chilenos, y a los españoles, es la diferenciación histórica, el convertirnos en pueblos adultos que no sientan miedo de amando a nuestros padres, o abuelos, decir que se equivocaron garrafalmente, todos? no, no todos.
Hay gente acá que trató de matar a Hitler, y algunos que pusieron bombas, yo traduje para algunos simultaneo, ya lo conté alguna vez. Yo no soy pacifista y eso quiere decir que no estoy contra la violencia “venga de donde venga”, reconozco violencia legítima e ilegítima. Y eso es lo peor que se les hace a los muertos. Y a esos habría que reconocerlos, acá se hace en parte. La guerra fría evitó el reconocimiento pleno de los comunistas y algunos socialdemócratas. También costó con los homosexuales y los gitanos. Y pena por si mismos tienen tanta que a veces se les nubla la mirada, pero oficialmente, Adrián aprende las cosas en la escuela absolutamente con una tendencia: error, el nazismo es un error.
No se puede decir lo mismo de mi país y tampoco de España.
Ese es mi problema.
En nuestro caso, ganó el dictador. Y el trato con el perdedor no fue simple, ni humano pero eso se puede reparar. Es la memoria histórica lo principal, la base de nuestro concepto de democracia y ser humano. Ahí tenemos el problema. Y España tiene más años de experiencia que mi paisito de morondonga, por eso miro para allá con insistencia.
Me acuerdo que en la época de la dictadura yo tenía un deseo para mi muerte (violenta), si llegaba a suceder y que yo esperaba no fuera inocente de lo que me acusaran:
Contra lo que la mayoría de las familias pedía, yo quería que si moría a manos de las fuerzas de la ley y el orden, padres del actual orden constitucional, en mi funeral quedara la batalla campal. Que de mi cuerpo se olvidaran, que usaran la oportunidad para reclamar, para luchar, para decir lo que había que decir contra una dictadura sangrienta y cruel como la del innombrable. Que el funeral y la tumba sirvieran para algo más que la dignidad que se le reconoce a un muerto.
No. Yo quería mucho a la abuela de mi marido, y tuvo la oportunidad de vivir muchísimos años, su vida tuvo de todo, grandes errores y grandes aciertos. Aciertos que no borraron el horror de sus desaciertos. Pero no, ella no dió la vida precisamente por la libertad, ni tampoco por el respeto a la dignidad ajena cuando le tocó elegir. Lo siento por ella y me alegro que tuviera la oportunidad de hacerlo mejor el resto de su vida. Y que pudiera ver que su nieto iba a cada manifestación por la paz que se le puso por delante y que leyó todos los diarios que pilló en donde se hablaba de los presos y campos de concentración que ella pudiera “no haber visto, no saber… no estar informada”. Es más su nieto alcanzó a decirlo, por qué no sabías? acá en el diario de tu época se anunciaba sin pudor.
Lo mínimo que se les debe a los republicanos, que perdieron, es un entierro digno pero por sobre todo decir lo evidente: tenían razón, y los otros instalaron una dictadura y eso no se hace. Todo lo demás es paja… o crueldad extra del vencedor, pero no va al meollo y por eso hay tantas palabras alrededor de unas tumbas inexistentes y tan pocos responsables. Igual que en Chile.
Y este comentario se lo dedico a Rosa y Sara de Lourdes, desaparecidas el 76, a las que sigo esperando para enterrarlas, pero sobre todo para darles las gracias por haber luchado contra la dictadura y decirles que no las olvido, pero sobre todo, que no me olvido de la historia del grupo de gentes en el que vinimos al mundo y que no toda violencia es mala porque no da lo mismo el venga de donde venga.
Todos los muertos dan dolor a alguien, pero solo algunos, además, alumbran los caminos.
Sábado, abril 21, 2012 a 1:29 pm
Pal
Gracias por darme la oportunidad de pensar. Eso de arriba, es mucho más un monólogo con mi sombra que otra cosa. (O será mi Hamlet con el fantasma de su padre…)